Hace unos días dábamos una serie de recomendaciones sobre el agua de bebida de los verracos. En este artículo podéis encontrar la segunda parte de esas recomendaciones:
Existen otras recomendaciones publicadas por otros autores para los parámetros físico-químicos y microbiológicos específicos para la producción animal.
Recomendaciones físico-químicas:
Recomendaciones microbiológicas:
Otras recomendaciones dadas por FEDNA son las siguientes:
Recomendaciones FEDNA para microbiología:
*** Explicación de los parámetros a analizar
TDS (sólidos totales disueltos)
Determina la salinidad del agua. Generalmente incluye lo minerales y sales de calcio, magnesio, sodio, bicarbonato, cloro, sulfatos, hierro, manganeso y otros.
Dureza del agua
Este parámetro hace referencia principalmente a la cantidad de sales de Ca++ y Mg++ disueltas. No suele presentar un problema para la producción y salud de los animales. Sin embargo, es importante su control ya que la precipitación de estas sales puede dañar el sistema de purificación y distribución del agua, siendo la principal causa de obstrucción de los bebederos. Por lo tanto, la dureza puede llegar a convertirse en un verdadero problema para la explotación si llega a obstaculizar la distribución del agua de bebida.
Un agua se considera blanda si tiene de 15 a 50 ppm (1°F = 10ppm), mientras que es catalogada como dura si tiene más de 180-200 ppm.
Estas sales de calcio y magnesio pueden interaccionar también con determinados tratamientos por el agua (inactivación de tetraciclinas por el Ca, Mg y Fe), también convendría valorar la formación de depósitos en orina y articulaciones.
Acidez y alcalinidad del agua
Normalmente el pH del agua en las explotaciones ganaderas suele oscilar entre 6,5 y 8,5. Raramente el pH del agua suele provocar problemas a los animales. Si bien es interesante saber que pH elevados debilitan el efecto de la cloración y que pH bajos pueden ser la causa de la precipitación de ciertos medicamentos administrados en el agua (sulfamidas). Así mismo, valores de pH extremos alteran el sistema de distribución del agua (tuberías, bebederos, válvulas, etc.).
Nitratos y nitritos
Los cerdos toleran bastante bien niveles elevados de nitratos. Los nitratos (NO3) se producen en la fase final de la descomposición de la materia orgánica. Su presencia en el agua es indicativo de contaminación, bien por residuos humanos o animales, o bien, por aguas de escorrentía con presencia de fertilizantes. Por el contrario, los nitritos (NO2) son producidos en las fases intermedias de la descomposición de los compuestos orgánicos.
Sulfatos
Es posiblemente uno de los principales responsables de la mala calidad del agua en las explotaciones animales. Los sulfatos no son bien tolerados provocando diarreas (lechones sobre todo) y retrasos en el crecimiento. Sin embargo, se suele observar una adaptación de los animales en pocas semanas a niveles moderadamente altos.
Hierro
El hierro presente en las aguas subterráneas está en forma soluble. Cuando el agua aflora a la superficie y entra en contacto con el oxígeno, el hierro precipita, pudiendo bloquear el sistema de conducción de agua o los propios bebederos. Para evitar este problema se pueden colocar filtros especiales para el hierro.
Materia orgánica
Niveles elevados pueden proteger a los microorganismos de la acción de desinfectantes y promover su desarrollo.
