La inseminación artificial consiste en la deposición del contenido de la dosis seminal, a través de la región cervical del aparato reproductor de la hembra, mediante el uso de una sonda simple o compuesta en la porción craneal del cérvix (1: tradicional), en el cuerpo del útero (2: post cervical), o el comienzo del cuerno uterino (3: intrauterina profunda)”.
Para realizar la inseminación post cervical se pueden utilizar varios sistemas:
Es muy importante el tipo de material utilizado en la sonda post cervical que debe cumplir una serie de requisitos:
– Tiene que ser lo suficientemente rígido para que pueda penetrar sin dificultad
– A su vez, debe ser flexible para que se doble en el caso de que la sonda no progrese de modo que no se hiera al animal
PROCEDIMIENTO
En primer lugar, se debe llevar a cabo la detección del celo con el/los verraco/s. Es importante que el personal que realiza esta tarea este lo más formado posible.
Una vez detectado el celo, no se recomienda el uso del verraco durante la inseminación, ya que, a la larga, tiene más inconvenientes que beneficios (hay gran variabilidad entre diferentes días de celo, cerdas tensas, nerviosa, hiper excitadas, etc.).
Así pues, una vez realizada la recela y retirado el macho, se comenzará a inseminar con el sistema post cervical sin presencia del verraco. Se recomienda inseminar las cerdas justo después de quitar el verraco y comenzar por las reproductoras que fueron receladas primero; si se quiere esperar un poco no inseminar más tarde de 45 minutos posteriores a la recela como máximo, porque las cerdas se comienzan a tumbar y el procedimiento conllevará mayor estrés para los animales y dificultad para los operarios.
Inicialmente se actuará igual que para una inseminación tradicional. Es decir:
1) Limpiar la vulva de las cerdas a inseminar,
para ello utilizar toallitas de papel (de un solo uso), retirando cualquier resto de suciedad tanto de la entrada, como del interior de la vulva para que esta no sea desplazada hacia el interior de la vagina con el catéter. Es recomendable utilizar toallitas higiénicas no espermicidas.
No mojar la vulva, y en caso de hacerlo es conveniente secarla, ya que al diluirse la suciedad se facilita su introducción el interior del aparato reproductor del animal.
2) Tomar el catéter por el tercio posterior y aplicar con cuidado gel lubricante en la punta. Procurar no tocar la punta ni la parte del catéter que va a ser introducida dentro del aparato reproductor.
3) Introducir el catéter:
3.1 Abrir la vulva con una mano, e introducir el catéter con la otra (se debe intentar que el catéter únicamente entre en contacto con el interior de la misma).
3.2 Introducir el catéter dirigiendo la punta hacia arriba (ángulo de unos 30º). Si se hace mal y se inserta por el meato urinario, puede llegar a observarse la salida de orina a través del catéter además de poder producir lesiones en el animal. Si esto ocurre, debemos desecharlo y utilizar otro.
4) Introducir la sonda de post cervical:
Tras la colocación del “catéter guía”, procederemos a introducir la sonda de post cervical con cuidado a través del catéter «guía», y en el momento en que se empieza a notar cierta resistencia (zona de los anillos del cérvix), realizar un poco de presión; en condiciones normales la sonda se introducirá hasta el final (cuerpo del útero); si vemos que la resistencia no cede y la sonda no progresa, la dejaremos anclada a los anillos del cérvix y volveremos a intentarlo pasados unos minutos.
5) Introducción de la dosis seminal:
Después de una correcta homogenización de la dosis, sin llegar a agitarla, se acoplará al final de la cánula y se ejercerá presión sobre la dosis para introducir su contenido a través de la sonda.
Con esta técnica, podemos introducir el contenido de la dosis de semen en el interior del cuerpo del útero en vez de esperar a que la hembra lo absorba, disminuyendo el tiempo necesario para la cada inseminación. La introducción de la dosis suele necesitar unos 20-30 segundos. Si se observa que el semen no fluye hacia el interior del útero se debe comprobar que el catéter guía y la sonda están en la posición correcta.
En general, el tipo de dosis seminales a utilizar para la post cervical en cerdas multíparas es de 30ml-45ml con 1-1.5 billones de espermatozoides totales, a temperatura de conservación (15-17ºC) no recomendándose atemperar las dosis a 36-37ºC, ya que no se ha observado ninguna ventaja. Es importante de utilizar envases adecuados para evitar la oxidación de las células espermáticas, no recomendándose en ninguno de los casos utilizar una dosis de 80-90 ml dividiéndola por la mitad e inseminar dos cerdas con ella.
6) Por último, se procede a sacar el conjunto catéter + sonda + dosis:
Sin quitar el envase, retirar la guía y la sonda, todo junto, como si fuera una pieza para evitar el reflujo del contenido de la dosis.
7) Pasar al siguiente animal:
La cerda necesita un pequeño periodo de tiempo para estimularse/relajarse, lo que va a hacer que podamos atravesar la zona cervical. Este efecto se produce a través de la estimulación mecánica que ejerce la punta del catéter guía, etc.
Con el fin de evitar tiempos muertos, la recomendación de Magapor es la de ir introduciendo varios catéteres guía siguiendo la «técnica 5-1». Esta metodología de trabajo consiste en limpiar 5 vulvas e ir poniendo catéteres guía, y una vez llegado al 5º, se vuelve al primero para introducir la sonda post-cervical. Una vez introducidas las 5 sondas se procederá a inseminar y a retirar los catéteres una vez finalizada la inseminación. En el caso de que alguna sonda no entrase, nosotros no perderíamos tiempo y pasaríamos a la siguiente cerda, dejando así unos minutos (no más de 15, en los que continuaríamos inseminando otras cerdas), para permitir la relajación del cérvix antes de volver a intentar introducir la sonda.
